Perogrulladas económicas (o cosas que ya sabemos)

Bueno, bueno, bueno. Después de la extensa y explícita -hay que ver qué cara tengo- entrada de ayer, volvemos a la normalidad.

Al parecer, «El FMI alerta de que la deuda hipotecaria puede frenar el crecimiento económico en España« [elmundo.es]. Parece ser que este organismo, formado por un montón de economistas que saben un montón de economía, ha llegado a la conclusión de que si nos gastamos mucho dinero en la hipoteca, acabaremos comprando menos cosas. A mí eso me parece algo bastante obvio, incluso si no eres un economista del FMI. Que no es por vacilarles a ustedes, pero eso lo sabía yo hace tiempo. Si tienes dos euros y te gastas uno en el periódico y el otro en agua mineral con gas, el día que el periódico sube de precio, puedes comprar menos agua mineral con gas (y la empresa de mineral con gas gana menos dinero, con lo que sube menos los salarios, dedica menos a innovar, contrata menos personal, menos servicios a otras empresas, que a su vez ganan menos, suben menos los salarios...). Vamos, que yo no sé mucho de economía, pero imagino que eso debe ser bastante básico. Claro que a lo mejor no y lo mío es pura casualidad. Ya saben que esto de manejar la pasta no es moco de pavo.

Pero es que a la vez, los mismos tipos -no los de interés, sino los del FMI- y sus amigos de Banco Mundial y el Banco de España no se cansan de advertir cada cierto tiempo del peligro de sobreendeudamiento de las familias españolas. Es decir, de que la gente gasta más de lo que gana. Y uno quiere imaginar que el mensaje que se desea transmitir al españolito es que modere la pasta que se funde y tenga en cuenta que los tipos de interés están subiendo, ¿no? Pues ya no sabe uno qué pensar, porque los tipos de interés se suben entre otras cosas para que la gente gaste menos, y nos acaban de alertar de que eso no acaba de ser bueno, ¿así que para qué los suben? (*)

Es decir, que si gastas mucho, malo porque te sobreendeudas, y si gastas poco, malo porque la economía no tira palante. Así que aunque nada me gustaría más que poder decirles qué tienen ustedes que hacer, y saber yo mismo qué hacer, me temo que va a ser que no, porque uno ya no entiende nada; hagan lo que les venga a ustedes en gana que al fin y al cabo es lo que mejor sabemos todos hacer.

 

(*) Aunque como les digo yo de esto sé más bien poco, los tipos de interés suben porque Alemania y Francia tiran del carro y Ejpaña pinta -tanto antes como ahora- más bien poco, que es lo mismo que decir que estos años han estado bajos porque los dos de antes, que son los que mandan en esto de Europa no acababan de arrancar.

[En Security A(r)tWork: ¿Un gusano en la manzana?]