A cascarla

!Es-pa-ña, ta-ta-ta! !Es-pa-ña, ta-ta-ta! (¿ta-ta-ta?)

Bien bien bien. Hoy toca fúrgol. Como frúgil, pero no. Fúrgol. Ejem... ¿Se me oye bien? ¿Sí? Bien...

Pues parece ser, por lo visto, que los mantas, digo jugadores del equipo nacional tienen problemas para clasificarse para el Mundial. Pues sí que es raro lo de esta gente, con el nivel que tienen, los jugadores, los títulos que han conquistado, etc, etc, etc... ¡Ejem! Etc... eso mismo: etc. La verdad es que, como creo que todo el mundo ha intuido ya, me trae bastante sin cuidado. Y no porque yo sea nacionalista, que no lo soy, ni porque esté de acuerdo en que Fernando Torres y Vicente son, como dice Pedro, las mayores mentiras del fútbol español (Raúl también lo es, pero como dice el mismo, al menos mete goles), sino porque lo de esta selección es de risa. De risa por lo patético, claro. Son de parodia. Y es que eso de nuestra selección que tanto gusta a los periodistas deportivos (hay que avivar el orgullo patrio que eso vende) es casi ofensivo. Será la suya, que yo no tengo acciones en esta y a mí me gusta más Argentina, Francia o Brasil.

...

Bueno, en realidad, ¿para qué mentir? Lo confieso, pero por favor, perdonádme: yo lo que quiero es que pierda España. Contra quien sea que le toque en la repesca, y si suena la flauta por casualidad y se clasifican, cuanto antes pierdan, mejor. Que ya estoy harto —lo que viene a ser hasta las narices— de tanto fracaso, tanto, como dicen en inglés, overhype, tanta sobrevaloración, y tanta gilipollez con once tipos en calzoncillos corriendo, poco y mal, por un campo de césped. Así al menos no tendré que tragarme a todas las televisiones dando la vara una y otra vez con el combinado de longaniza y morcilla nacional durante el Mundial. 

Así, que como decía aquél: Ale, a cascarla.